El alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio, descendió a rapel del icónico Faro de Comercio, de una altura de 70 metros.
Tras el arranque de la restauración del monumento que cumplió 40 años de construcción, el alcalde regio decidió bajar del Faro tras una autorización hecha por Protección Civil municipal ante las ráfagas de viento que afectaba al monumento.
Ante autoridades de la Cámara de Comercio de Monterrey que encabeza Fernando Canales, la multitud se sorprendió por el hecho.
“La verdad, le soy sincero, pensé que me iba a dar en la madre, estuvo bastante divertido, se ve espectacular la ciudad, los 37 niveles en la escalera y estar arriba (fue lo más complicado», dijo Colosio Riojas.
Indicó que ya había rapeleado en Matacanes, en el municipio de Santiago, y La Huasteca, en Santa Catarina.