Las presas son la fuente de abastecimiento de agua y de aporte de recursos naturales para el desarrollo de actividades que permiten generar el sustento de la población aledaña a su cauce.
En Nuevo León, actualmente se vive una crisis de agua, la cual no solo ha afectado a la zona metropolitana de Monterrey, pues también los ejidatarios de la zona sur de la entidad, han tenido que dejar la agricultura ante la extrema sequía por la que se está pasando.
Una de las más importantes en el estado, es la presa Rodrigo Gómez, mejor conocida como presa La Boca, ubicada a 34 kilómetros de la capital nuevoleonesa, en el municipio de Santiago.
La construcción de la presa La Boca inició en 1961 y terminó en 1963 con el objetivo de abastecer agua para el Área Metropolitana.
Su verdadero nombre es en honor al impulsor de este proyecto, Rodrigo Gómez, nacido en Linares, Nuevo León, quien fue director general del Banco de México de 1952 a 1970.
El embalse abarca 455 hectáreas y tiene una capacidad de 39.49 millones de metros cúbicos de agua, nutriéndose de la captación de lluvias y de varios arroyos, pero principalmente del conocido como “La Chueca”, así como de los escurrimientos de las montañas cercanas.